domingo, 14 de junio de 2015

Llegó el gran día. 
Cuando comenzamos este curso, allá por el mes de septiembre, parecía que este día quedaba lejos. Pero ya está, ya llegó. 
La suerte está echada y, vosotros, mis alumnos y alumnas, debéis confiar en vuestras posibilidades. Yo estaba segura de vuestras capacidades y con la voluntad, conseguiréis llegar donde os propongáis.  
La vida es una carrera de obstáculos. Hasta ahora, en esa carrera os han acompañado vuestros padres y si, también vuestros profesores. A partir de ahora, volaréis solos. Seguiremos a vuestro lado, pero tomaréis vuestras decisiones, encontraréis nuevos amigos, nuevos profesores, nuevas esperanzas...Abrid bien los ojos y sobre todo, la mente; escuchad todo aquello que os digan; incluso el ser que os parezca más insignificante puede deciros y aportaros algo valioso. 
Y si no conseguís la meta propuesta en el momento que  habíais deseado, no pasa nada. Seguro que ese no era el mejor destino para vosotros en ese instante. Pero no desfallezcáis, el tesón y la constancia os ayudarán a conseguirlo. 
Ahora, solamente me queda, por si acaso, desearos un poquito de SUERTE
daros las GRACIAS por todos esos buenos momentos que hemos pasado juntos y pediros PERDÓN si en algún momento no he sabido estar a la altura de vuestras demandas...